Seguimos trabajando

Ya tenemos en el bolsillo el primer mesociclo, contento porque ha ido muy bien, me hubiera gustado ir al gimnasio pero ya tengo que dar gracias de que puedo entrenar sobre la bici como para encima tener que sacar mas tiempo para ir al gimnasio... podría costarme un divorcio, además de una úlcera o una angina de pecho, y bueno, el año pasado tampoco pude ir y no me fue nada mal.

Contra todo pronóstico he podido realizar lo planificado al 100%, la cosa se ha complicado al comenzar el segundo mesociclo, que lo he iniciado con un virus estomacal, que me obligó a claudicar en el primer entrenamiento, nada grave que con un día de descanso y la alimentación adecuada no se haya superado, ayer el segundo entrenamiento salió a pedir de boca. Hoy volveré a descansar.

Respecto a los años anteriores he notado que aunque debido a la cadencia todavía duelen los isquiones (el culo) no tanto como dolía, también la velocidad ha aumentado mucho o muchísimo si miramos el primer año, además este año me ha sido mucho mas fácil mantener la cadencia y el ritmo constante desde el primer día.

Sin mucho mas que contar, solo me queda desearos Feliz Año a todos, yo por mi parte intentaré no meterme mucho peso aunque va a estar difícil.

Final y principio

Tres semanas han separado la última marcha de la gala de entrega de premios, tres semanas que me han servido para descansar y desconectar de los entrenamientos, me hubiera gustado subir al monte un par de veces pero entre el clima que hemos tenido, la lista de tareas pendientes y demás cosas que han ido surgiendo no he podido nada mas que limpiar la bici, engrasarla y colocarle los slicks, dejándola a punto para la pretemporada.

Ejercicio claro que he hecho, nada mas de pensarlo me da la risa, he ido a la piscina a nadar, que nada tiene que ver con la natación. Allí me plantaba yo con mis bermudas rojas (de la despedida de soltero de Mich y que todavía me duran), el gorro (yo creo que me iba pequeño porque me entraba agua en el oído derecho), las gafas (con las que me entraba agua al ojo derecho, que casualidad ¿eh? por el mismo lado que al oído), la toalla (para qué Juan? si… bueno, para dejar encima la llave de la taquilla) y mis chancletas (del chino de abajo ‘fashion, fashion’). El primer día le pregunto a la socorrista ‘¿qué calles son para nado libre?’ ‘pues las que tienen el cartel’ me contestó, ‘bien, bien, fijándote en los detalles…‘ claro que sin gafas no vi que una era rápida y la otra lenta, sin quererlo me metí en la autovía…pufff. Al sumergirme muy bien, una agradable sensación me envolvía hasta que comenzaba a nadar y me daba cuenta que tenía que depurar mi técnica, bueno depurar… a braza ni tan mal pero a crol no era capaz de hacer mas de cuatro piscinas (25 metros, no os vayáis a creer que era olímpica), los últimos días llegue a hacer 1 kilómetro en media hora (venga 33 minutos). Con cinco sesiones de estas he tenido suficiente ‘natación’ hasta el verano que viene que iremos el equipo al completo a la playa con cubo, pala, rastrillo y sombrilla… ‘como dios está mandao’.

Ayer fue la gala de entrega de premios en las bodegas de Villar del Arzobispo, hubo muy buen ambiente, mucha gente y una pequeña feria en la que varias tiendas y Bkool (que bien pinta esto) exponían su material. Tras repartir los obsequios a los participantes (pedazo de chaqueta y de chaleco, del vino no puedo hablar porque los que me conocen saben que desde que me caí a la marmita no lo puedo probar), la gala comenzaba con el discurso de rigor para dar paso a la entrega de trofeos. En lo personal me llevé dos, segundo clasificado al mejor de 9 pruebas y primer clasificado M30 de los clubs organizadores. Los Dinobikers nos íbamos cargados, Kike se llevó tres copas, tercer clasificado de Elite, primer clasificado de Elite de los clubs organizadores y primer clasificado al mejor de 9 pruebas. Y los Dinobikers fuimos medalla de bronce al club organizador mas numeroso en participación. Después pusieron un buen almuerzo amenizado por una pantalla gigante con sonido surround (o mas), en la que pudimos ver todos los vídeos de las carreras del circuto, la verdad es que así se ven de otra manera, lucían mucho mas que en el ordenador en modo 'videotubo'.

Creo que de lo escrito podéis deducir que al final 'continuo para bingo' (no lo tenía nada claro pero los resultados me han animado a seguir) y que el año que viene si no pasa nada estaré dando guerra de nuevo, hoy he comenzado los entrenamientos, a diferencia de otros periodos de descanso, en este no he cogido tanto peso y he hecho algo de ejercicio, por lo que las sensaciones en la bici han sido muy buenas, he tenido que ‘levantar el pie’ en mas de una ocasión ya que acostumbrado a las últimas sesiones de entrenamiento me pasaba de zona, pero el acondicionamiento ha sido rápido y no creo que tarde mucho en volar (aeróbicamente hablando, claro) por las carretera de huerta que tan bien me conozco ya.Seguiremos informando (lo que no digo es cuando).

La penúltima

Ayer salieron las clasificaciones finales del circuito, para mi sorpresa he sido el quinto clasificado en Master 30, en mis cábalas no contaba con la puntuación de Alpuente, pero gracias a ella empatamos a puntos el quinto y sexto clasificado y por número de pruebas salgo beneficiado, no se pero parece que lo que no se gana sobre la bici…

El siete de noviembre del año pasado comencé los entrenamientos con una hora y media de ejercicio aeróbico, el seis de noviembre de este año corrí la última marcha de la temporada siendo el décimo en pasar por debajo del arco. Durante este año ha habido de todo, muchos meses de pretemporada sacando minutos de donde no los había para poder entrenar, el verano que tras un parón demasiado largo conseguí reengancharme, las vacaciones durante las cuales pude salvar los muebles, dolores musculares y tendinosos, semanas inacabadas por el cansancio,… todo culminado con un total de cuatro meses de competición en un estado de forma increíble, en el que los peores resultados han sido similares a los mejores de la temporada pasada. Ahora que todavía me estoy planteando si planificar la temporada que viene, miro hacia atrás con una sonrisa en la boca, de los malos momentos ya no queda nada, solo quedan los buenos recuerdos… subir un puerto a una marcha mas que el resto, que me canten la posición y superar expectativas, volar por sendas bien cuidadas rodeado de espadas, pasar por el arco, ver a los míos, conocer el resultado y explotar de alegría, consultar la web para ver si han colgado las clasificaciones actualizadas y cuando están ver que voy tercero… o segundo, conocer a otros frikis, siempre buena gente, que como yo están enganchados a esto de las bicis,… Estuve a punto de dejarlo en Higueruelas antes de verano y en Chelva justo antes de la última prueba, menos mal que continué en ambas ocasiones.

Por otro lado Los Dinobikers tenemos que estar muy contentos como Club, sin ser ni mucho menos de los mas numerosos hemos sido terceros en la clasificación de clubes organizadores, por lo que el pdf de clasificación final está salpicado por muchos Dinos por todas partes, hemos conseguido pódiums como el de Eva que solo ella sabe lo que sufrió para conseguirlo, Manolo que tuvo un gran inicio de temporada pero que unos problemas físicos no le dejaron continuar y Kike que a base de subirse al pódium ha cosechado una fabulosa medalla de bronce en la clasificación final de Elite. Y si miramos a la clasificación individual a nivel de clubs organizadores tenemos dos primeros puestos, un tercero, un cuarto, octavo… bien!.

Ahora solo queda acudir a la gala a darlo todo pero esta vez no con la bici sino con el piscolabis... jajaja, y para terminar todas las conversaciones que dejé a medias o que ni empecé con amigos por tener que ir a calentar.

Sot de Chera

Hace ya unos años, todavía no existía el circuito, fui a una previa en Sot de Chera, me gustó tanto que a las dos semanas fui a la carrera pese al agua que caía, en la previa hicimos las dos sendas que hemos hecho hoy, en la marcha las tuvieron que quitar ya que medioambiente no les dió el permiso, todavía recuerdo a los guardias mojándose a la entrada de la senda. Llevaba mi Scott Vail con v-brakes, me quedé sin zapatas y por lo tanto sin frenos, fue la última vez que pedaleé con ella, esa misma semana la cambié por la KTM Race Force, pero esto es otra historia...

A pesar de haber descuidado la alimentación y de no haber completado los entrenamientos la semana pasada, esta semana me encontré bien sobre la bici, mis sensaciones eran muy positivas y cuando anoche Bea me deseaba suerte antes de dormirnos pensé 'la tendré!'. Esta mañaba en el coche sonaban los motores, en realidad llevo tres días seguidos escuchándolos, trallazo tras trallazo han ido impregnándome parte de su fuerza.

La gente hoy se ha puesto demasiado pronto en la salida, salíamos a las nueve y media, a menos cuarto ya había gente esperando '¿estamos locos?', Kike y yo no tardaríamos en ponernos también '¡qué remedio!', apretados a los lados del arco para dejar pasar a los coches, incluso teniéndonos que quitar para que pasara la ambulancia 'joder, es que es muy pronto'. Hemos tenido mucho tiempo para hablar y Kike ha sabido transmitirme su pensamiento positivo, cuando le he dicho 'que pena que haya venido Torres, sino hoy hacías primero', sin dudarlo muy serio me ha contestado 'yo siempre vengo a ganar', si señor, justo lo que me ha faltado a mi todo el circuito... mentalidad ganadora.

Nueve y media, dan la salida, '¡ahí vamos!', se me mete gente delante pero no pierdo referencias, estoy frío, las piernas van porque no pierdo posiciones pero no lo suficiente porque no adelanto a nadie, 'queda mucha carrera', cruzamos la carretera, comenzamos a subir la cuesta de cemento y no tardo en comenzar a adelantar, ahí voy remontando hasta que hacemos una grupeta pero dura poco, nos estiramos por delante veo que se ha hecho otra alcanzo a Ismael y le animo a seguirme para cogerlos, lo conseguimos, pero él se descuelga, en el camino nos cruzamos con Kike me dice algo pero no le escucho y continúo. No recuerdo muy bien cuando, pero hay un momento que me cantan el puesto 'vas el octavo' '¿cómo?'. Dentro del grupo voy con el gancho, me cuesta pero les sigo, hay un momento que incluso uno se descuelga poniéndose a mi rueda, comenzamos a bajar, vamos rápido pero dentro de mis posibilidades, no estiramos pero no nos separamos, bien hasta que un soplo de viento me desplaza lateramente poniéndome dentro de una regata, el chaval que llevaba detrás me adelanta, yo tengo que frenar para no caerme dentro de la regata y porque me he llevado un buen susto, salgo de ella '¡vamos!', los tengo cerca, salimos a pista, otra vez para arriba, no consigo darles alcance pero veo que voy recortando distancia. Aquí comienza mi carrera en solitario.

Llevamos casi 20 Km. y salvo algunos respiros no hemos parado de subir, entramos en la trialera, mis preocupaciones cambian, ahora en vez de intentar alcanzar a los de delante voy a tratar de que no me recorten distancias los que llevo por detrás, me vuelven a cantar la posición 'décimo!'. Bajo muy bien, la trialera está muy cuidada y el terreno está en un estado inmejorable, voy muy rápido, en el último tercio me coge la rueda uno, le doy paso y le aguanto la rueda, veo como baja y alucino, yo paso por los mismos sitios que él pero no con su soltura, en una curva saca el pie y yo directamente me bajo, para subirme inmediatamente pero le perdí la rueda y se fue yendo, 'ya queda poco', salimos al pueblo lo tengo a tiro, pero va un punto por encima mío, vamos por sendas junto al río, me dicen que voy el décimo 'te has equivocado voy el once', cruzamos el río tres veces, la primera y la segunda veo piedras por donde pasar andando, pero la tercera no las veo y paso en bici, el agua está fría, me llega por las rodillas... 'puffff, qué frío!'.

Llegamos a pie de los barrancos, en una de las primeras rampas otro golpe de viento me saca de la trazada metiéndome en la gravilla, patino y hago pie, subo unos metros andando, me monto en un llano, seguimos subiendo duro pero nada comparado con lo que tiene que venir. Al rato aparece 'GO' escrito en el camino y al rato 'RIP', me encuentro en las rampas mas duras de todo el circuito, salvo el cortafuegos de Villar que creo que no es ciclable (con sus excepciones) y las de Alpuente que aunque las he subido no ha sido en carrera (no puedo comparar). Sigo solo y voy subiendo, tengo que meter plato pequeño, intento no hacerlo pero de vez en cuando me giro a ver si me sigue alguien, no quiero que me vean, a mi ver a alguien por delante me sube la moral y voy el onceavo 'mi mejor posición'. Por pista buena vamos subiendo y bajando hasta llegar a una bajada muy rápida, veo Sote pero se que todavía queda una trialera.

No tardan en desviarnos, está muy empinada con buenos giros pero bajo bien, voy subidito y me subo mas todavía al ver la marca de un kilómetro a meta, me lo vuelven a decir 'vas el décimo' '¿será verdad?', salimos a un camino y de ahí al pueblo, en el cemento bloqueo la horquilla bajo piñones, se que queda poco, me vacío en un sprint solitario, ya en la plaza en una bajadita voy tan fuerte que se me levanta la rueda y en la curva de 90º entro derrapando antes de pasar por el arco, lo dicen hasta por megafonía '¡qué fuerte entra el 202!'.

Efectivamente he entrado el décimo, mi mejor posición en la general, 'alguien habrá abandonado', veo a Quimi y a Cris y les abrazo, menudo subidón, veo a Ismael que ha pinchado y ha abandonado '¡qué mala suerte!', enseguida entra Kike un par de puestos por detrás de mi, iba pinchado y se le había estropeado la bomba, cuando me lo crucé me pidió la mía y yo no le oí, 'lo siento, tendría que haber parado', si no hubiera pinchado... ya lo decía él. Rápidamente nos vamos para las duchas y no tardo en oirles 'Décimo, décimo, papi eres un campeón!', creí que no vendrían por el mal tiempo, pero ahí están, como siempre.

Un pelín de desilusión al ver que en Master 30 he quedado el octavo, pero bueno ya sabía desde un principio que es la categoría con mas nivel y hoy no ha fallado casi nadie.

Se acabó.

Último día de intensidad antes de Sote.

Dejo a Diego en el cole, me da un beso, un abrazo, anda dos pasos y con la mano llama a su compi diciendo ‘¡vamos, vamos!, ¡vamos dentro!’, regresamos a casa, sin querer acelero el paso, voy con otro padre, llegamos, ‘mañana nos vemos’, subo corriendo, mientras me disfrazo, pongo una lavadora, preparo el botellín… 40% isotónica, 60% agua mineral, cojo un gel energético, móvil, llaves y para el trastero, ‘ya recogeré luego, que como me descuide me mojo’ (lo primero es lo primero), mi cabeza no para de maquinar ‘salgo diez minutos tarde’, ya en la puerta activo el gps para grabar la ruta ‘en un minuto comienza’, me subo a la bici y al pasar el semáforo activo el pulsómetro…

Pedaleo ágil, las pulsaciones van subiendo, para calentar ruedo a un ritmo aeróbico bajo unos diez minutos, aumento el ritmo, me pongo en zona aeróbica media, como hay algún repecho las pulsaciones aumentan puntualmente pero sin salir de la franja aeróbica. Llego a pie de puerto ‘¡comienza la fiesta!’…

Al principio hay una buena rampa, las pulsaciones aumentan superando el ochenta y cinco por ciento de las máximas, se mantienen, aumento mínimamente la intensidad y al rato ya están en el umbral anaeróbico, ‘no te ha costado tanto Juan, ahora hay que mantenerlo’. Cómodo, cómodo no voy, pero se puede aguantar, leo ciento setenta y dos ‘vas bien, pero no te pases’, leo ciento setenta ‘bien’, leo ciento sesenta y ocho ‘no aflojes’, mantengo mi conversación interior, llega una pequeña bajada, meto plato, bajan las pulsaciones ‘ciento sesenta y cinco’, vuelta a subir, bajo el plato, enseguida las pulsaciones vuelven al umbral ‘bien’, llegando a la mitad del puerto mi conversación interior cambia de un simple seguimiento de la situación a ánimos dirigidos hacia mi mismo, es un poco raro pero funciona porque en el pulsómetro sigue el baile entre el ciento sesenta y nueve y el ciento setenta y dos, en el último tercio entre los ánimos intercalo alguna frase para convencerme de que ya no queda nada. En los últimos quinientos metros debería haber hecho un sprint progresivo pero… ‘ya está bien’.

Me dejo caer por la otra cara del puerto, recupero y cuando llego abajo ruedo a ritmo aeróbico hasta un punto que siempre uso de referencia para darme la vuelta, continúo hasta pie de puerto, me tomo el gel y vuelta a la fiesta…

Igual que antes comienzan a aumentar las pulsaciones, supero las primeras rampas, viene un llano y todavía no han llegado al umbral, se mantienen alrededor del ochenta y cinco por ciento, de nuevo comienza la ascensión, no tardan en entrar en la zona… ‘ciento setenta, ciento setenta y dos, ciento sesenta y ocho, ciento setenta y tres…’, todavía no estoy en el primer tercio del puerto y retomo la conversación conmigo mismo ‘venga Juan que lo estás haciendo bien’, las rampas mas duras han pasado pero todavía queda, en el segundo tercio la subida es continua, no concede treguas, retomo los ánimos e igual que antes no voy silbando pero aguanto el tipo. En el tramo final hay un momento en el que la subida afloja, bajo coronas y aprieto, esto me viene muy bien (sobretodo mentalmente) para afrontar el final, corono, he conseguido mantener el ritmo… ‘¡bien!’.

Lanzo la bici en la bajada, paso por una fuente, tanteo el bidón ‘tienes suficiente’, tras el tiempo de recuperación vuelvo al ritmo aeróbico medio, llego a Bétera y… ‘he mejorado el tiempo, flipo’ la verdad es que pocas veces me he mantenido en el umbral toda la subida, si alguna otra vez lo conseguí fue gracias a algún ciclista que hizo de liebre por delante de mi, como dije en la entrada anterior… estoy muy bien pero un poco cansado.

Antes de entrar en el pueblo tomo un desvío ‘voy a rodar un poco mas’, enseguida me cruzo con Pedro y juntos rodamos un rato ‘este chico el año que viene nos va a poner firme a mas de uno, si no al tiempo’. La agradable conversación (como siempre) me ayuda a descongestionar un poco el coco ‘no debe ser sano entrenar tanto tiempo solo’. Nos despedimos ‘¡nos vemos en Sote!’, vuelvo a casa, a la ducha y después recoger, comprar…

Un año... ahí es nada

El domingo hará un año que comencé este macrociclo y el domingo lo daré por finalizado. No puedo hablar de distancias porque no uso cuentakilómetros, pero si puedo decir que el domingo llevaré mas de cuatrocientas horas subido a la bicicleta, para algunos serán muchas para otros pocas, pero mi cuerpo ya hace tiempo que superó el límite, lleva tiempo enviándome señales y yo llevo tiempo ignorándolas. Cuando me bajé de la bici en Chelva pronuncié las palabras mágicas: 'se acabó' pero tras charlar con algunos compis cambié de opinión: 'total para una que queda...'. Después de una semana de recuperación y una de choque que no pude terminar (por cansancio físico y mental) comienzo la última semana, no voy a tratar de engañar ni a mi ni a nadie, llego como llego, peor que en el primer pico de forma y mejor que el mejor momento del año pasado, bien en cualquier caso.

La cabeza va a su rollo y como salgo solo el 99% del tiempo, podéis imaginar la de veces que me planteo tirar la toalla, cada vez me cuesta mas subirme a la bici, una vez en el camino se pasan los males y disfruto, pero hasta que llego al camino... puff!. Cuando llego a casa la cosa cambia, como me he encontrado bien me sube la moral y me como el mundo. Tengo molestias en el tedón del cuádriceps de la pierna izquierda y en el tendón de inserción del sartorio en la espina ilíaca, estirar es un suplicio, cuesta encontrar la pose en la que el músculo estira sin molestia (o con la mínima). Como las molestias las siento al estirar, nunca sobre la bici, después de estirar comienza la bajada hasta el siguiente entrenamiento, si sumamos que cada vez cuesta mas recuperarme del cansancio...

No es momento todavía de pensar en la temporada que viene, de momento en cuanto termine me tomaré un descanso, haciendo otras cosas y saliendo a pajarear al monte una o dos veces por semana, sin pulsómetro, ni gps, ni velocímetro... nada de eso, solamente la bici, el monte, el frío, la humedad, el barro, las piedras... y yo... la idea original.

Sin ánimo de sembrar el pánico (o si), ni predisposicionar a nadie (o si... jajajaja), quiero contaros tres desagradables encontronazos con la naturaleza en el último mes, los tres con un mismo origen... insecto por delante de mi, a gran velocidad, en la misma dirección que la mía, pero con sentido opuesto, esto da lugar a un impacto. El primer choque tuvo lugar en mi cuello, con la consiguiente picadura, por el dolor tipo calambre y la ausencia de aguijón imagino que fue una avispa, la cual me dejó amargado un buen rato. El segundo no se que insecto sería, por suerte no me picó, cosa que no hizo menos desagradable el encuentro, ya que esté se introdujo a gran velocidad por mi fosa nasal izquierda, en el acto espiré aire con fuerza para expulsarlo, no se muy bien a que fue debido (impacto o fuerte espiración) pero me dejó un fuerte dolor en la nariz que duró un par de días. Y el tercero fue ayer, creo que esta vez fue una abeja la que se introdujo en mi casco, de inmediato me lo quité y con la mano la espolsé, la abeja se debió quedar en mi mano y se introdujo por mi guante (corto), por eso al cabo de unos segundos de haberme vuelto a colocar el casco, me picó en el dedo meñique de mi mano derecha, todavía lo llevo hinchado respecto a su homólogo de la mano izquierda. Mañana cogeré algo para las picaduras, lo guardaré junto al tronchacadenas y los desmontables.

Nos vemos en Sote.

Chelva

Sin apenas calentar, con treinta y cinco minutos de antelación, nos dirigíamos hacia la salida, en la plaza tras pegar un vistazo vi que faltaba gente ‘que raro’, con el rabillo del ojo vi que en un callejón habían muchos ciclistas, ni me lo pensé, les pegué un grito a Pedro y a Carlos ‘por aquí!!!' y rápidamente fuimos para allí. Había ya bastante gente, por encima de la acera conseguimos acercarnos a la valla, pero aun quedaba un buen trozo y además nos habíamos quedado encima de la acera, ‘bueno, podía haber sido peor’.

Justo antes de salir veo un pequeño hueco, bajo la bici de la acera, salgo decidido a no perder ni un puesto, es mas consigo ganar alguno apurando todos los huecos que veo en mi camino, llegamos al badén en el que se termina la neutralización, suena la bocina, me pongo a dar pedales como si la vida me fuera en ello, comienzo a adelantar, no tardo en situarme bien, por delante veo la cabeza de carrera (en busca del jamón que había de premio al primero en coronar), me encuentro bien y sigo adelantando, veo el grupo al que me quiero unir y le doy alcance, recupero, sigo encontrándome bien y tras recuperar, llego a ponerme por delante pero no me puedo despegar, coronamos el primer puerto, iniciamos la bajada por pista y camino, casi me paso el desvío hacia la senda y les pego un grito a los de delante que si que se lo habían pasado.

Comenzamos por senda fácil, vamos ágiles, me trago un escalón, la horquilla hace bien su trabajo y como la recepción es buena no pasa nada, la cosa comienza a complicarse con giros de 180º, los voy superando sin problemas pero me voy atrancando, noto que se me ponen a rueda, llevamos delante a otro que va al mismo ritmo que yo, acaban pidiendo paso, les doy paso y les cojo la rueda, el de delante nos deja pasar, aguanto un rato y leo un cartel ‘CURVAS PELIGROSAS’, ‘¿¡cómo!?’, las curvas son parecidas pero el terreno se va poniendo cada vez mas vertical, me descuelgo, a mi ritmo voy bajando, en alguna curva me toca sacar el pie, oigo ruedas ‘me están alcanzando’, cada vez con mas dificultad voy haciendo los giros, hay otro cartel ‘CURVA PELIGROSA’, cuando la veo me bajo de la bici, me aparto, me adelantan, el primero se cae, le pregunto, me dice que está bien, el segundo pasa, bajamos andando (el que se ha caído y yo), montamos y salimos de la trialera, 'mal Juan, has perdido mucho tiempo'.

Llega el segundo puerto, comenzamos una subida, está señalizada (me parece leer ‘la cortinilla’ o algo así), pienso ‘cuando nos dicen el nombre… malo’, tras pasar un tramo duro, comienza una larga y sostenida ascensión, oigo gritos de Alex animándome a cogerles, va en un grupo mas avanzado, pasamos unos túneles, adelanto a alguno pero no alcanzo al grupo, me falta la chispa que tuve antes de verano, llego a un corto tramo de bajada, dejo la pista para entrar en camino poco pisado, con buenas rampas tanto de subida como de bajada, comienza la senda, me cantan que voy el 30, '¿cómo?', bajo muy cómodo (demasiado) y muy seguro (demasiado), me falta una referencia, salgo a pista, comienza una rapidísima bajada, con unas curvas de cemento de 180º, pienso ‘por aquí deben gustar estos giros porque tienen muchos’, me adelantan pero no se me van, bajamos muy rápido para acabar parando la bici en cada curva (y eso que son de cemento rascado).

Salimos a una subida asfaltada con unas rampas de infarto, voy a rueda, nos van dando alcance, coronamos veo un pueblo, ‘ya casi estamos’, pero algo no me cuadra ese pueblo está abajo y nosotros acabamos subiendo ‘malo’, el pueblo no era Chelva sino Calles, ‘aun queda’, nos desvían por un camino donde nos esperan otras rampas de ‘aupa’, estas no están asfaltadas, todo lo contrario tiene unas piedras como puños, me patina la rueda, hago pie y ni lo intento, termino andando, vamos hacia Chelva por camino, nos metemos por una divertida senda con toboganes, me cogen la rueda, vamos ágiles, comienza la subida al pueblo, en un tramo muy empinado nos pegan un empujón, ‘gracias’, me voy dejando al de detrás, entramos en el pueblo, ‘menudas rampas’, salimos a una calle con escaleras en el medio, me pongo a la derecha, me dicen que me cambie, cruzo a través de los pequeños escalones apretando los dientes porque me viene justo, me planteo lanzar un ataque pero no vale la pena, veo a Roberto le doy la mano, continúo, salimos a la plaza, fin.

Al coger el diploma me disgusté, el 22 de la general y 14 de M30, quería entrar entre los 10 primeros de la categoría. Ahora lo pienso y tengo que estar contento, no se puede estar siempre al 100% y yo ya tuve mi momento, me planteé dar por finalizada la temporada, pero no, no me puedo perder el fin de fiesta, iré a Sote, a darlo todo, como siempre.

Definitivamente esto ya no es noticia: Kike se volvió a subir al pódium, enhorabuena máquina!.

Las circunstancias impidieron tener a mi club de fans animándome en la meta, cuando llegué a casa me esperaban ansiosos… para darme un fuerte abrazo.

La San Diego de Tuéjar

La San Diego de Tuéjar es una marcha con solera, celebraba ayer su decimotercera edición, desde que me aficioné al mtb siempre la he querido disputar pero por un motivo u otro nunca lo había hecho antes. Tras un buen madrugón y un buen desayuno íbamos la familia al completo camino Tuéjar, la marcha nos servía de excusa para juntarnos después los amigos a disfrutar de buenas chuletas y buen embutido en la fuente del Saz.

En Tuéjar nos esperaba frío, así que tras recoger el dorsal y montar la bici, me iba con poco tiempo a calentar y a la salida, me junto con Kike, aunque en la salida nos separamos, faltaban unos veinte minutos, parece que el frío ha hecho que nos coloquemos un poco mas tarde. Charlando con la gente se iba acercando la hora y muchos participantes iban tomando posiciones… por delante de nosotros.

Dan la salida, neutralizada… neutralizadísima diría yo, por ahí he leído que algún track da fe de que íbamos a 7 km/h, a ese ritmo iban metiéndose ciclistas por delante de mí, claro los que vienen detrás aprovechan para recuperar puestos y van metiendo presión, decido apurar espacios para que no se me meta nadie, pero el de delante hace pie obligándome a mi también, pasándome inmediatamente una bici por encima de mi pie y soltándome el cierre de la zapatilla ‘empezamos bien’, decido dejarlo para apretar mas tarde. Hay coches a los lados, la gente subiéndose por las aceras (tras los coches), salimos a la carretera, pienso que ahora nos sueltan ‘esta es la mía’, pues no, seguimos neutralizados, subimos por la plaza (neutralizados), salimos a una carretera de campo (neutralizados), aceleramos pero de golpe la gente para (seguimos neutralizados), veo como me voy quedando atrás, giramos 180º dejando a la vista el largo pelotón que llevo por delante (creo que seguimos neutralizados porque vamos muy lento), de vez en cuando acelerón con su consiguiente parón, cuando cogimos el primer camino tenía una muralla de ciclistas por delante de mí al que adelantar y el mundo se me vino al suelo, íbamos por llano y bajada, deprisa (para abajo todos corremos mucho), antes de cruzar bajo la carretera a un compañero se le fue la rueda delantera y se va al suelo, yo iba detrás y paré indicando a la gente que había un ciclista en el suelo, pero al que llevo mas cerca no le da tiempo y le pasa por encima cayéndose también, este se queja mucho del hombro, sigo haciendo indicaciones a los que vienen por detrás para que aflojen, para alguno y se hacen a un lado, aquí yo dudo si quedarme o seguir, pero como veo que ya se han apartado y la cosa ya no debe ir a mayores decido seguir (con la imagen en mi cabeza del chico que se agarraba el hombro con gestos de mucho dolor), en cuanto veo a los primeros espectadores antes de llegar al Azud les indico que ha habido una caída y que avisen a la organización.

En el Azud hay algún amigo que se extraña por mi retrasada posición. Me entran dudas y se me pasa por la cabeza darme la vuelta para el pueblo, pero decido seguir, con la carrera mas estirada se puede adelantar y lo hago, comienzo a machacar las bielas cojo buena velocidad y no paro de adelantar, me cuesta pero al final veo una cara conocida, le adelanto haciendo un gesto mínimo de saludo y continúo, empieza ‘La Buenaleche’ y yo sigo a lo mío, voy adelantando y de vez en cuando a algún conocido ‘vamos!’, me voy dando cuenta que estoy mas cerca de los míos pero aun queda, veo pintada una calavera en el suelo y una marca ‘23%’, se me atraganta, pero aun así veo la gente que me rodea y calculo que debemos estar entre los 40 primeros ‘aun queda Juan’ y cada vez con mas esfuerzo los voy dejando atrás, coronamos ‘ha estado bien’, allí está Kimi y me anima '¿has visto que remontada?.

En la senda voy solo casi todo el tiempo, disfrutando, es larga, está un poco suelta, conforme voy avanzando se me van cargando las muñecas, empiezo a oír gente por detrás, veo a Michel, le pregunto por el tramo malo y me dice que viene enseguida (ya me habían avisado que si no lo conocía mejor a pie y así lo hice), llego y veo que hay mucha expectación, veo también la piedra y me bajo de la bici paso corriendo, monto y continúo ‘cagontó!... seguro que me han grabado en vídeo’.

Pasamos de nuevo por el Azud (o cerca) y comienza la segunda subida, si La Buenaleche tiene rampas del 23% esta tiene algunas que no estarán muy lejos, adelanto y me adelantan, saliendo la cuenta a mi favor, esta subida y la senda que le sigue las conozco, de la pista salimos a camino, donde veo a Alejandro que ha pinchado 'que mala pata!', me anima 'venga que los tienes ahí!', gracias pero ya estaban muy lejos y del camino a la senda, por esta vuelo (gracias a la pluma que me puso Diego en el dorsal), es la tercera vez que bajo por aquí, la primera con la Peña de Bétera el día que estrenaba la Stumpjumper FSR blanca y la segunda al poquito tiempo con JoseK. Antes de llegar iba pensando en ello ‘Juan, frena que aunque te la conozcas, antes ibas con la Stumpy’ y con las mismas pensaba ‘qué cojo#&$!’ y efectivamente ‘que cojones!!!’ bajé al límite y es que esta senda se presta a ello, no me adelantó ni se me arrimó nadie, se me hizo muy corta, a la que me di cuenta ya estaba saliendo al aljibe y por pista al Azud, esta estaba suelta y alguna curva la tomé casi parado (para morirse), abajo oigo a Bea dándome ánimos, y como un resorte me puse de pie a machacar los pedales, '¿avituallamiento? no quiero nada', y de ahí al pueblo…

...si pero dando un rodeo, yo creía que ya habíamos terminado, pero me pregunté ‘¿por qué han puesto un avituallamiento tan cerca del final?’, ‘claro pájaro, esta es la sorpresa que había leído en algún sitio’. En una vuelta a tener en cuenta, aun nos quedaba cruzar un río, un roto badén y una subida de apretar los dientes (recuerdo que me habían dicho que al final había una para subir andando y así lo hago), por detrás me fueron recortando terreno, me adelantó uno pero no se me fue, bajamos una senda, después en el llano me puse yo a tirar ‘pero Juan ten cuidado que este te da el hachazo al final’ porque vi que llevábamos a otro cerca, nos indican que queda un kilómetro a meta y veo una subida, subo dándolo todo ‘me sigue’, salimos a asfalto mas llano ‘me sigue’, entramos en la recta de meta ‘me sigue’, bloqueo, me pongo de pie, sprinto ‘vamos papi!!!!’ ‘jejeje ahí están’, veo que mi perseguidor se va quedando y entro en meta…

…con un cabreo considerable porque de repente me vino a la cabeza la salida, y como no, así se lo hice saber a todo el que se cruzó en mi camino, yo creo que la gente huía de mi ‘menudo brasas!’. Ahora a toro pasado sigo pensando que la salida estuvo mal planteada, pero que fue la misma para todos y que si perdí tantísimos puestos fue por no saber defenderlos. El 24 de la general y 14 de M30 está muy bien, pero sabe a poco, haciendo una salida en condiciones me hubiera metido sin problemas entre los 20 primeros (creo que arañando el 15).

En la meta vi al compañero que se cayó delante de mi, le pusieron tres puntos y me dijo que creía que el otro chico se dislocó la clavícula, se le fue la rueda porque se le metió en una regata que no vio ‘qué mala suerte, animo a los dos!’.

Ducha en casa de Jose (muchas gracias amigo) y a comer a la fuente del Saz, por donde habíamos pasado dos veces en la marcha.

A Kimi y a Cris los vi varias veces animándome (muchas gracias), hoy iban de paisano haciendo fotos... os deseo lo mejor, la boda es solo el principio de una feliz vida juntos, me alegro por vosotros, un besazo de parte de los García Ros.

Kike otra vez al pódium, al final dejará de ser noticia, enhorabuena!, a ver si la próxima llego contigo.

Una gran marcha, con un gran recorrido, después de tanto tiempo por fin he corrido en Tuéjar y a pesar del mal sabor de boca por la salida (tan) neutralizada, me ha parecido una de las mejores marchas en las que he participado.

Girona

Antes de comenzar con la entrada quiero dar la enhorabuena a los compis Dinobikers Alpuente-La Yesa por la organización de la marcha, me consta que fue todo un éxito, da gusto pertenecer a este grupo, siento no haber estado para contribuir, pero este año la fecha ha sido incompatible con nuestras vacaciones, el año que viene será y seguro que logramos superar los exitos ya conseguidos.

Tras pasar dos semanas de vacaciones en tierras catalanas y de haber corrido allí una marcha, tengo que decir que aquello es un paraiso para la práctica de mtb.

Llegué y para completar el entrenamiento tenía que hacer una semana de intensidad, pero salvo uno, los tracks que conseguí de la zona donde estaba tenían muy poco desnivel, entonces planifiqué dos salidas por carretera para rodar, otra sería el track que tenía con algo de desnivel y como me enteré que el sábado por la tarde había una marcha en Girona, la aprovecharía como entrenamiento.


Por carretera llegué a pueblos (Peratalada, Palau Sator, Pals,...) y calas (Aigua Blava, Calella, Sa Tuna...) increíbles. Cuando salí al monte lo hice por el macizo de Torroella de Montgrí, ruta que a pesar de no tener demasiado desnivel acumulado (cerca de 600 metros) se hizo dura, sobretodo por una subida por senda muy exigente, desde lejos el macizo se ve como una montaña de roca pelada, pero nada mas lejos de la realidad, la ruta discurrió por bosque cerrado la mayor parte del tiempo y durante un tramo fui bordeando la costa con unas vistas impresionantes (Bahía de Rosas, Illes Medes, L'Estartit, desembocadura del Ter...), al día siguiente cogeríamos un barco para ver esta costa (incluídas Illes Medes) pero desde el mar.


El sábado 17 después de comer íbamos el equipo al completo (entrenador, preparador, mecánico, masajista, corredor y afición... vamos, yo con la familia) a Salt (Girona), con un poco de nervios porque no sabía con lo que me iba a encontrar. Como iba algo justo de tiempo nada mas llegar fui corriendo a inscribirme, me puse en una cola (de varias que habían) en la que ponía 'federados' (y yo lo estoy), pero resulta que aquí diferencian licencias cicloturistas de competitivas ya que la marcha era además una carrera de la Copa Gironina y después de hacer toda la cola me tocó hacer otra, no hizo falta rellenar nada pues se quedaron con la licencia para devolvérmela después de la marcha. Me quedé flipado con lo que allí había... una carrera a pie de 10 km, dos marchas mtb, una de 20 km y otra de 30 km (la larga inicialmente era de 39 pero la tuvieron que recortar porque no les dejaron pasar por ciertos caminos), una carrera de la Copa Gironina, otra de promesas y varias para niños en un circuito curradísimo que prepararon en un descampado, sorteaban de todo (i-phones, blackberries, lotes de embutido...), habían dos speakers disfrazados haciendo la coña, un toro mecánico..., la verdad es que montaron buena fiesta.


Estaba esperando para inscribirme, algo mosqueado por lo de los dos circuitos y mas cuando el largo en solo 30 km (que al final fueron unos 32) tenía casi 1000 metros de acumulado, cuando sonó la flama de Obrint Pas, 'hombre mira ya tengo tema para el blog' y se me pasaron un poco los nervios. Ya inscrito y con el dorsal, fui corriendo para el coche donde me esperaban Bea y Diego, monté la bici y a calentar, quedaban 20 minutos, calenté controlando la salida pero hasta la hora no se puso nadie, ya en la salida vi que habían hecho un cajón, llamaron y se pusieron en el los primeros clasificados en La Copa, estábamos esperando cuando Bea me dijo que había un puesto que vendía geles y que si quería uno, 'venga, que esto me parece que va a ser una escabechina' (y menos mal).


Dan la salida, aquí también es neutralizada y aquí también se cuela la gente por delante, veo siempre la cabeza de carrera, nos dan via libre y mi primer fallo fue no apretar mas, pero como no tenía referencias quise reservar, tras un giro de 180º entramos en camino y enseguida en la primera senda, subida y todo el mundo a pie, se estira la cosa pero por necesidad ya que íbamos por senda y no habían mas narices, a partir de aquí y hasta el kilómetro 15, en grupo por sendas para arriba, sendas para abajo y mas sendas en llano, adelantando lo justito, mas que nada porque no se podía, y cuando se podía tenías que recuperar, subiendo iba un punto mas que los que me rodeaban y bajando a la par dentro del grupo. Hubieron momentos en los que para adelantar me comí ramas, piedras,... pero es que si no no había forma. La marcha era un rompepiernas constante, sin descansos, no hubo ninguna subida larga, fueron todo rampas para arriba y para abajo, sin apenas descanso, cuando vi la marca del kilómetro 7 no me lo creía, era imposible que solamente lleváramos 7 kilómetros. Al poco hicimos una bajada por un tendido eléctrico, recta pero con mucho desnivel, solté la bici y a mitad me encontré con un poste que no pude esquivar, al suelo, compruebo que la bici está bien (yo lo estoy) y cuando quiero reincorporarme, veo que no puedo, son muchos los que venían en fila india detrás de mi, al final en un pequeño hueco me echo la bici al hombro y corriendo para abajo, pero lo que tienen estas bajadas es que se bajan mejor sobre la bici y en estas circunstancias no me podía montar, menos mal que mas abajo se complicaba la cosa y el de delante de mi echó pie a tierra también. Al principio reservé un poco en las bajadas por precaución, pero me volví a soltar y para adelante, así continuó la cosa, hasta el kilómetro 15 donde me pegó un bajón, tiré de gel y aguanté el tipo con el grupo, no se porqué hasta este momento no habían habido mas marcas (a parte de la del km 7), pero a partir de aquí marcaron todos los kilómetros uno a uno, lo que hizo mas duro mi bajón que duró hasta el 20 mas o menos, a partir de aquí volví a escalar puestos, ahora incluso alguno bajando. Hubo un momento que conté hasta 5 toboganes seguidos... pero de subida, el último muy suelto y con escalón que hice andando. Lo últimos kilómetros los hice en solitario hasta que nos juntamos casi en la meta con los que habían hecho la corta, aquí aun adelanté a alguno de los que habíamos ido juntos al principio, antes de meta aun pasamos por un túnel que era un barrizal donde nos quedábamos todos clavados, de ahí a meta.


2h 05m para hacer 32 kilómetros creo que pueden ayudar a que os hagáis una idea de lo dura que fue, quedé sexto de la marcha, pero claro aquí no contaban los que corrían la copa, en total hubiera quedado sobre el cuarenta, el primero la hizo en 1h 40m... sin palabras. Calculo que mas del 90% fueron sendas, muy cuidadas todas y siempre a la sombra (menos mal porque salíamos a las 16h), precioso y duro recorrido que me recordó a los que tantas veces he visto por la tele (o internet) en campeonatos mundiales.


Ahí va la gráfica del desnivel...

La semana siguiente la hice regenerativa con bici y de vacaciones en la costa catalana.