lunes, 31 de octubre de 2011

Un año... ahí es nada

El domingo hará un año que comencé este macrociclo y el domingo lo daré por finalizado. No puedo hablar de distancias porque no uso cuentakilómetros, pero si puedo decir que el domingo llevaré mas de cuatrocientas horas subido a la bicicleta, para algunos serán muchas para otros pocas, pero mi cuerpo ya hace tiempo que superó el límite, lleva tiempo enviándome señales y yo llevo tiempo ignorándolas. Cuando me bajé de la bici en Chelva pronuncié las palabras mágicas: 'se acabó' pero tras charlar con algunos compis cambié de opinión: 'total para una que queda...'. Después de una semana de recuperación y una de choque que no pude terminar (por cansancio físico y mental) comienzo la última semana, no voy a tratar de engañar ni a mi ni a nadie, llego como llego, peor que en el primer pico de forma y mejor que el mejor momento del año pasado, bien en cualquier caso.

La cabeza va a su rollo y como salgo solo el 99% del tiempo, podéis imaginar la de veces que me planteo tirar la toalla, cada vez me cuesta mas subirme a la bici, una vez en el camino se pasan los males y disfruto, pero hasta que llego al camino... puff!. Cuando llego a casa la cosa cambia, como me he encontrado bien me sube la moral y me como el mundo. Tengo molestias en el tedón del cuádriceps de la pierna izquierda y en el tendón de inserción del sartorio en la espina ilíaca, estirar es un suplicio, cuesta encontrar la pose en la que el músculo estira sin molestia (o con la mínima). Como las molestias las siento al estirar, nunca sobre la bici, después de estirar comienza la bajada hasta el siguiente entrenamiento, si sumamos que cada vez cuesta mas recuperarme del cansancio...

No es momento todavía de pensar en la temporada que viene, de momento en cuanto termine me tomaré un descanso, haciendo otras cosas y saliendo a pajarear al monte una o dos veces por semana, sin pulsómetro, ni gps, ni velocímetro... nada de eso, solamente la bici, el monte, el frío, la humedad, el barro, las piedras... y yo... la idea original.


Sin ánimo de sembrar el pánico (o si), ni predisposicionar a nadie (o si... jajajaja), quiero contaros tres desagradables encontronazos con la naturaleza en el último mes, los tres con un mismo origen... insecto por delante de mi, a gran velocidad, en la misma dirección que la mía, pero con sentido opuesto, esto da lugar a un impacto. El primer choque tuvo lugar en mi cuello, con la consiguiente picadura, por el dolor tipo calambre y la ausencia de aguijón imagino que fue una avispa, la cual me dejó amargado un buen rato. El segundo no se que insecto sería, por suerte no me picó, cosa que no hizo menos desagradable el encuentro, ya que esté se introdujo a gran velocidad por mi fosa nasal izquierda, en el acto espiré aire con fuerza para expulsarlo, no se muy bien a que fue debido (impacto o fuerte espiración) pero me dejó un fuerte dolor en la nariz que duró un par de días. Y el tercero fue ayer, creo que esta vez fue una abeja la que se introdujo en mi casco, de inmediato me lo quité y con la mano la espolsé, la abeja se debió quedar en mi mano y se introdujo por mi guante (corto), por eso al cabo de unos segundos de haberme vuelto a colocar el casco, me picó en el dedo meñique de mi mano derecha, todavía lo llevo hinchado respecto a su homólogo de la mano izquierda. Mañana cogeré algo para las picaduras, lo guardaré junto al tronchacadenas y los desmontables.

Nos vemos en Sote.

lunes, 17 de octubre de 2011

Chelva

Sin apenas calentar, con treinta y cinco minutos de antelación, nos dirigíamos hacia la salida, en la plaza tras pegar un vistazo vi que faltaba gente ‘que raro’, con el rabillo del ojo vi que en un callejón habían muchos ciclistas, ni me lo pensé, les pegué un grito a Pedro y a Carlos ‘por aquí!!!' y rápidamente fuimos para allí. Había ya bastante gente, por encima de la acera conseguimos acercarnos a la valla, pero aun quedaba un buen trozo y además nos habíamos quedado encima de la acera, ‘bueno, podía haber sido peor’.

Justo antes de salir veo un pequeño hueco, bajo la bici de la acera, salgo decidido a no perder ni un puesto, es mas consigo ganar alguno apurando todos los huecos que veo en mi camino, llegamos al badén en el que se termina la neutralización, suena la bocina, me pongo a dar pedales como si la vida me fuera en ello, comienzo a adelantar, no tardo en situarme bien, por delante veo la cabeza de carrera (en busca del jamón que había de premio al primero en coronar), me encuentro bien y sigo adelantando, veo el grupo al que me quiero unir y le doy alcance, recupero, sigo encontrándome bien y tras recuperar, llego a ponerme por delante pero no me puedo despegar, coronamos el primer puerto, iniciamos la bajada por pista y camino, casi me paso el desvío hacia la senda y les pego un grito a los de delante que si que se lo habían pasado.

Comenzamos por senda fácil, vamos ágiles, me trago un escalón, la horquilla hace bien su trabajo y como la recepción es buena no pasa nada, la cosa comienza a complicarse con giros de 180º, los voy superando sin problemas pero me voy atrancando, noto que se me ponen a rueda, llevamos delante a otro que va al mismo ritmo que yo, acaban pidiendo paso, les doy paso y les cojo la rueda, el de delante nos deja pasar, aguanto un rato y leo un cartel ‘CURVAS PELIGROSAS’, ‘¿¡cómo!?’, las curvas son parecidas pero el terreno se va poniendo cada vez mas vertical, me descuelgo, a mi ritmo voy bajando, en alguna curva me toca sacar el pie, oigo ruedas ‘me están alcanzando’, cada vez con mas dificultad voy haciendo los giros, hay otro cartel ‘CURVA PELIGROSA’, cuando la veo me bajo de la bici, me aparto, me adelantan, el primero se cae, le pregunto, me dice que está bien, el segundo pasa, bajamos andando (el que se ha caído y yo), montamos y salimos de la trialera, 'mal Juan, has perdido mucho tiempo'.

Llega el segundo puerto, comenzamos una subida, está señalizada (me parece leer ‘la cortinilla’ o algo así), pienso ‘cuando nos dicen el nombre… malo’, tras pasar un tramo duro, comienza una larga y sostenida ascensión, oigo gritos de Alex animándome a cogerles, va en un grupo mas avanzado, pasamos unos túneles, adelanto a alguno pero no alcanzo al grupo, me falta la chispa que tuve antes de verano, llego a un corto tramo de bajada, dejo la pista para entrar en camino poco pisado, con buenas rampas tanto de subida como de bajada, comienza la senda, me cantan que voy el 30, '¿cómo?', bajo muy cómodo (demasiado) y muy seguro (demasiado), me falta una referencia, salgo a pista, comienza una rapidísima bajada, con unas curvas de cemento de 180º, pienso ‘por aquí deben gustar estos giros porque tienen muchos’, me adelantan pero no se me van, bajamos muy rápido para acabar parando la bici en cada curva (y eso que son de cemento rascado).

Salimos a una subida asfaltada con unas rampas de infarto, voy a rueda, nos van dando alcance, coronamos veo un pueblo, ‘ya casi estamos’, pero algo no me cuadra ese pueblo está abajo y nosotros acabamos subiendo ‘malo’, el pueblo no era Chelva sino Calles, ‘aun queda’, nos desvían por un camino donde nos esperan otras rampas de ‘aupa’, estas no están asfaltadas, todo lo contrario tiene unas piedras como puños, me patina la rueda, hago pie y ni lo intento, termino andando, vamos hacia Chelva por camino, nos metemos por una divertida senda con toboganes, me cogen la rueda, vamos ágiles, comienza la subida al pueblo, en un tramo muy empinado nos pegan un empujón, ‘gracias’, me voy dejando al de detrás, entramos en el pueblo, ‘menudas rampas’, salimos a una calle con escaleras en el medio, me pongo a la derecha, me dicen que me cambie, cruzo a través de los pequeños escalones apretando los dientes porque me viene justo, me planteo lanzar un ataque pero no vale la pena, veo a Roberto le doy la mano, continúo, salimos a la plaza, fin.

Al coger el diploma me disgusté, el 22 de la general y 14 de M30, quería entrar entre los 10 primeros de la categoría. Ahora lo pienso y tengo que estar contento, no se puede estar siempre al 100% y yo ya tuve mi momento, me planteé dar por finalizada la temporada, pero no, no me puedo perder el fin de fiesta, iré a Sote, a darlo todo, como siempre.

Definitivamente esto ya no es noticia: Kike se volvió a subir al pódium, enhorabuena máquina!.

Las circunstancias impidieron tener a mi club de fans animándome en la meta, cuando llegué a casa me esperaban ansiosos… para darme un fuerte abrazo.

lunes, 3 de octubre de 2011

La San Diego de Tuéjar

La San Diego de Tuéjar es una marcha con solera, celebraba ayer su decimotercera edición, desde que me aficioné al mtb siempre la he querido disputar pero por un motivo u otro nunca lo había hecho antes. Tras un buen madrugón y un buen desayuno íbamos la familia al completo camino Tuéjar, la marcha nos servía de excusa para juntarnos después los amigos a disfrutar de buenas chuletas y buen embutido en la fuente del Saz.

En Tuéjar nos esperaba frío, así que tras recoger el dorsal y montar la bici, me iba con poco tiempo a calentar y a la salida, me junto con Kike, aunque en la salida nos separamos, faltaban unos veinte minutos, parece que el frío ha hecho que nos coloquemos un poco mas tarde. Charlando con la gente se iba acercando la hora y muchos participantes iban tomando posiciones… por delante de nosotros.

Dan la salida, neutralizada… neutralizadísima diría yo, por ahí he leído que algún track da fe de que íbamos a 7 km/h, a ese ritmo iban metiéndose ciclistas por delante de mí, claro los que vienen detrás aprovechan para recuperar puestos y van metiendo presión, decido apurar espacios para que no se me meta nadie, pero el de delante hace pie obligándome a mi también, pasándome inmediatamente una bici por encima de mi pie y soltándome el cierre de la zapatilla ‘empezamos bien’, decido dejarlo para apretar mas tarde. Hay coches a los lados, la gente subiéndose por las aceras (tras los coches), salimos a la carretera, pienso que ahora nos sueltan ‘esta es la mía’, pues no, seguimos neutralizados, subimos por la plaza (neutralizados), salimos a una carretera de campo (neutralizados), aceleramos pero de golpe la gente para (seguimos neutralizados), veo como me voy quedando atrás, giramos 180º dejando a la vista el largo pelotón que llevo por delante (creo que seguimos neutralizados porque vamos muy lento), de vez en cuando acelerón con su consiguiente parón, cuando cogimos el primer camino tenía una muralla de ciclistas por delante de mí al que adelantar y el mundo se me vino al suelo, íbamos por llano y bajada, deprisa (para abajo todos corremos mucho), antes de cruzar bajo la carretera a un compañero se le fue la rueda delantera y se va al suelo, yo iba detrás y paré indicando a la gente que había un ciclista en el suelo, pero al que llevo mas cerca no le da tiempo y le pasa por encima cayéndose también, este se queja mucho del hombro, sigo haciendo indicaciones a los que vienen por detrás para que aflojen, para alguno y se hacen a un lado, aquí yo dudo si quedarme o seguir, pero como veo que ya se han apartado y la cosa ya no debe ir a mayores decido seguir (con la imagen en mi cabeza del chico que se agarraba el hombro con gestos de mucho dolor), en cuanto veo a los primeros espectadores antes de llegar al Azud les indico que ha habido una caída y que avisen a la organización.

En el Azud hay algún amigo que se extraña por mi retrasada posición. Me entran dudas y se me pasa por la cabeza darme la vuelta para el pueblo, pero decido seguir, con la carrera mas estirada se puede adelantar y lo hago, comienzo a machacar las bielas cojo buena velocidad y no paro de adelantar, me cuesta pero al final veo una cara conocida, le adelanto haciendo un gesto mínimo de saludo y continúo, empieza ‘La Buenaleche’ y yo sigo a lo mío, voy adelantando y de vez en cuando a algún conocido ‘vamos!’, me voy dando cuenta que estoy mas cerca de los míos pero aun queda, veo pintada una calavera en el suelo y una marca ‘23%’, se me atraganta, pero aun así veo la gente que me rodea y calculo que debemos estar entre los 40 primeros ‘aun queda Juan’ y cada vez con mas esfuerzo los voy dejando atrás, coronamos ‘ha estado bien’, allí está Kimi y me anima '¿has visto que remontada?.

En la senda voy solo casi todo el tiempo, disfrutando, es larga, está un poco suelta, conforme voy avanzando se me van cargando las muñecas, empiezo a oír gente por detrás, veo a Michel, le pregunto por el tramo malo y me dice que viene enseguida (ya me habían avisado que si no lo conocía mejor a pie y así lo hice), llego y veo que hay mucha expectación, veo también la piedra y me bajo de la bici paso corriendo, monto y continúo ‘cagontó!... seguro que me han grabado en vídeo’.

Pasamos de nuevo por el Azud (o cerca) y comienza la segunda subida, si La Buenaleche tiene rampas del 23% esta tiene algunas que no estarán muy lejos, adelanto y me adelantan, saliendo la cuenta a mi favor, esta subida y la senda que le sigue las conozco, de la pista salimos a camino, donde veo a Alejandro que ha pinchado 'que mala pata!', me anima 'venga que los tienes ahí!', gracias pero ya estaban muy lejos y del camino a la senda, por esta vuelo (gracias a la pluma que me puso Diego en el dorsal), es la tercera vez que bajo por aquí, la primera con la Peña de Bétera el día que estrenaba la Stumpjumper FSR blanca y la segunda al poquito tiempo con JoseK. Antes de llegar iba pensando en ello ‘Juan, frena que aunque te la conozcas, antes ibas con la Stumpy’ y con las mismas pensaba ‘qué cojo#&$!’ y efectivamente ‘que cojones!!!’ bajé al límite y es que esta senda se presta a ello, no me adelantó ni se me arrimó nadie, se me hizo muy corta, a la que me di cuenta ya estaba saliendo al aljibe y por pista al Azud, esta estaba suelta y alguna curva la tomé casi parado (para morirse), abajo oigo a Bea dándome ánimos, y como un resorte me puse de pie a machacar los pedales, '¿avituallamiento? no quiero nada', y de ahí al pueblo…

...si pero dando un rodeo, yo creía que ya habíamos terminado, pero me pregunté ‘¿por qué han puesto un avituallamiento tan cerca del final?’, ‘claro pájaro, esta es la sorpresa que había leído en algún sitio’. En una vuelta a tener en cuenta, aun nos quedaba cruzar un río, un roto badén y una subida de apretar los dientes (recuerdo que me habían dicho que al final había una para subir andando y así lo hago), por detrás me fueron recortando terreno, me adelantó uno pero no se me fue, bajamos una senda, después en el llano me puse yo a tirar ‘pero Juan ten cuidado que este te da el hachazo al final’ porque vi que llevábamos a otro cerca, nos indican que queda un kilómetro a meta y veo una subida, subo dándolo todo ‘me sigue’, salimos a asfalto mas llano ‘me sigue’, entramos en la recta de meta ‘me sigue’, bloqueo, me pongo de pie, sprinto ‘vamos papi!!!!’ ‘jejeje ahí están’, veo que mi perseguidor se va quedando y entro en meta…

…con un cabreo considerable porque de repente me vino a la cabeza la salida, y como no, así se lo hice saber a todo el que se cruzó en mi camino, yo creo que la gente huía de mi ‘menudo brasas!’. Ahora a toro pasado sigo pensando que la salida estuvo mal planteada, pero que fue la misma para todos y que si perdí tantísimos puestos fue por no saber defenderlos. El 24 de la general y 14 de M30 está muy bien, pero sabe a poco, haciendo una salida en condiciones me hubiera metido sin problemas entre los 20 primeros (creo que arañando el 15).

En la meta vi al compañero que se cayó delante de mi, le pusieron tres puntos y me dijo que creía que el otro chico se dislocó la clavícula, se le fue la rueda porque se le metió en una regata que no vio ‘qué mala suerte, animo a los dos!’.

Ducha en casa de Jose (muchas gracias amigo) y a comer a la fuente del Saz, por donde habíamos pasado dos veces en la marcha.

A Kimi y a Cris los vi varias veces animándome (muchas gracias), hoy iban de paisano haciendo fotos... os deseo lo mejor, la boda es solo el principio de una feliz vida juntos, me alegro por vosotros, un besazo de parte de los García Ros.

Kike otra vez al pódium, al final dejará de ser noticia, enhorabuena!, a ver si la próxima llego contigo.

Una gran marcha, con un gran recorrido, después de tanto tiempo por fin he corrido en Tuéjar y a pesar del mal sabor de boca por la salida (tan) neutralizada, me ha parecido una de las mejores marchas en las que he participado.